Juventus-Udinese Tuvo su resolución a 4 minutos del final con el gol de Danilo determinado por la combinación entre Paredes y Chiesa. Una victoria de nariz corta, según la definición actual a estas alturas, más aún teniendo en cuenta que incluso tres días antes los bianconeri lograron los 3 puntos jugando con el reloj en Cremona con el gol de Milik.
Pero hasta el último 1-0 que se produjo en el Juventus-Udinese fue prácticamente idéntico. Y en ese caso, en el banquillo blanquinegro estaba Antonio Conte, que pasó a la historia por una forma de afrontar los partidos considerada antítesis a la de su sucesor. En la 2013-14 el éxito ante los friulanos (dirigidos por Guidolin) estuvo propiciado por un desvío de Fernando Llorente. Misma puerta, mismo epílogo. Y en lugar del hocico corto, se habló de un último suspiro, por 3 puntos igualmente importantes.
