Barcelona ha realizado seis fichajes este verano y parecía una fuerza potencial a tener en cuenta esta temporada, si no fuera por una historia importante.
Los blaugrana parecen dispuestos a difundir el mensaje de que están ‘de vuelta’ después de dos temporadas austeras y deprimentes en el Camp Nou. Los fichajes de Robert Lewandowski, Jules Kounde, Raphinha, Franck Kessie, Andreas Christensen y la renovación de Ousmane Dembele.
Sin embargo, se ha filtrado que sus planes pueden fracasar. Habían pensado que la activación de sus palancas económicas les permitiría registrar a sus nuevas estrellas, pero LaLiga ha decidido que sus cuentas no son exactas según sus reglas.
A principios de semana se supo que el Barcelona se había reunido con los agentes de Sergio Busquets y Gerard Piqué para discutir la reducción o el retraso de sus salarios para ayudar a registrar a sus nuevos jugadores. Mundo Deportivo dice ahora que esos encuentros salieron bien y ambos están abierto a ayudar al club. La temporada pasada ambos lo hicieron con el fin de ayudar a fichar a Memphis Depay y Sergio Agüero.
Dos veteranos tanto del éxito como del fracaso en Barcelona, Busquets y Piqué han sido objeto de fuertes críticas en los últimos años. Dados los sacrificios que ambos han hecho por su patrón, parece un poco injusto cuestionar su compromiso con su club.