Real Betis y Real Sociedad protagonizaron un tenso empate en el Reale Arena en el que ambos buscan continuar con su buen momento y alcanzar al Atlético de Madrid en la carrera por las plazas de Champions.
El equipo local tuvo más posesión y quizás la mejor de las oportunidades, pero en realidad fue un asunto en gran medida cauteloso y ninguno de los lados pudo jugar a su verdadero nivel. Dada la calidad de ambas escuadras, fue un partido decepcionante.
El momento álgido de la emoción llegó en el minuto 92, cuando el Betis recibió un lanzamiento de falta cerca del área de la Sociedad. Con el especialista en jugadas a balón parado Nabil Fekir en el campo todo era posible, y la Real estaba tan aterrorizada que en las protestas que siguieron David Silva fue expulsado, en una pérdida de control poco habitual.
Esa fue la primera tarjeta roja de su carrera, en su juego número 700.
Ahora solo queda ver cómo se comporta el Atlético el domingo en su partido pendiente ante el Espanyol
