El entrenador en jefe del Chelsea, Graham Potter, admitió que si bien fue un alivio vencer al Leeds United el sábado, su equipo no puede dormirse en los laureles y ahora debe embarcarse en una buena racha.
Los Blues habían ganado solo uno de sus 11 juegos antes del encuentro de este fin de semana con Leeds en Stamford Bridge, y habían marcado solo seis goles en todas las competiciones desde Bonfire Night, el recuento más bajo de cualquier club profesional en Inglaterra en ese momento.
Un cabezazo en la segunda mitad de Wesley Fofana, quien pasó lesionado gran parte de su temporada de debut en Chelsea, aseguró una victoria por 1-0 y tres valiosos puntos para Potter y sus hombres.
Cuando se le preguntó después del partido si esto era una señal de que no había perdido el vestuario, Potter quiso centrar la atención en los resultados.
«Necesita manifestarse en victorias. Hablar es barato», respondió.
«Los resultados no han sido lo suficientemente buenos y esa es mi responsabilidad. Tenemos que intentar mejorar y ganar. Ese es el trabajo».
Potter agregó: «Estamos encantados con la victoria, eso es seguro. Hemos tenido un período difícil. Estoy encantado por los jugadores y los aficionados porque hemos tenido que sufrir».
«Empezamos bien, creamos algunas oportunidades, pero jugar contra el Leeds es difícil porque tienen mucha intensidad. Conseguimos el gol y luego en la segunda mitad teníamos algo que perder, lo cual es comprensible dada la racha que hemos tenido».
El Chelsea de Potter le da la bienvenida al Borussia Dortmund a Stamford Bridge el martes para revertir un déficit de 1-0 en los octavos de final de la Liga de Campeones.