Getafe 0-0 Barcelona
Ambos equipos tenían mucho más que perder en este partido que ganar y así comenzó el partido.
La primera mitad fue lenta, tanto en términos de circulación de balón como de creación de ocasiones. El Getafe se adelantó con poca frecuencia, pero logró superar en disparos al Barcelona en la primera parte (tres tiros a puerta a ninguno).
Sin balón condensaron el terreno de juego en una estrecha franja entre su área y la línea media, lo que pareció desconcertar al Barcelona. Su mediocampo exploró sin encontrar muchas vías de mejora. Cuando jugaron el pase, invariablemente fue demasiado por delante de sus delanteros.
La segunda mitad, de alguna manera, vio muy poca variación en ese tema. Hubo algún que otro contraataque del Getafe, pero se mantuvo firme en su bloque defensivo ante un ataque del Barcelona que mostró poca ambición de atravesarlo, sortearlo o superarlo.
La noticia de primera plana para el Barcelona es que el segundo puesto está garantizado y Ansu Fati superó su media hora ileso. Desafortunadamente, Memphis no lo hizo, sintiendo una punzada muscular.
El Getafe celebró con el pitido tener por fin la confirmación de lo que habían estado tan cerca durante tantas semanas. Quique Sánchez Flores llegó a un Getafe sin victorias que la mayoría vio como seguro que caería y los moldeó en un conjunto sólido. Con un partido de sobra, obtuvo su justa recompensa.